Entra el profesor y nos dice:
“chicos vamos a ponernos todos de pie, que hoy os voy a enseñar dos técnicas de
meditación para fortalecer cuerpo y mente y venir con más energía a clase”.
Parece que estoy hablando de una clase de yoga o Pilates en un gimnasio, pues
no amigos, estoy hablando de la clase de economía, una clase que cada día nos
sorprende más, es como una caja de sorpresas.
Una vez terminadas las técnicas
de meditación, continuamos analizando y situando en la rosa de los vientos
nuestras respectivas noticias. Pero la clase de hoy, nos ha desvelado lo que
para el profesor significa el dichoso Norte, Sur, Oeste y Este
que estamos acostumbrados a ver todos días de clase dibujado en la pizarra. Nos
ha explicado dos formas de cómo ve él, la Rosa de los Vientos:
1) El
primer modelo se basa en que el Este es lo que somos, lo que sabemos,
nuestra historia, es el punto de partida y a partir de aquí es donde nos
movemos. El Norte es lo frío, lo
respetuoso, donde no hay emociones, es donde buscamos información y pensamos
solos .Pasamos al Oeste
donde toda esa información se transforma en nuestros proyectos a través del
conocimiento y el pensamiento, por aquí va el sol, por lo que por aquí va la
vida, llevamos el proyecto hacia el futuro pero aquí solo está el proyecto, un
mero conjunto de ideas articuladas pero que todavía no es nada. Llegamos al Sur, sinónimo de acción, lleno de
emociones, donde se puede distorsionar el proyecto (límites, gente en contra y
a favor, barreras que no sabias ni que te ibas a encontrar...). El Sur es
un mundo comunicado, lleno de interacción (recursos grupales y amigos), es decir, en el sur influye nuestra
forma de dirigir el proyecto que puede ir a bien o quedarse en nada.
2) En
el segundo modelo, el punto de partida es
el centro, el núcleo, ya que nos explica lo que es nuclear en un sistema, pero
no es un agujero negro. Cada vez que te mueves estas adquiriendo un excedente
para seguir creciendo. El punto de partida es la tasa de salario por unidad
producida, que tiene que ver con la relación social entre dos partes, vinculada
a la tasa de explotación y tiende a disminuir al igual que su capacidad de
compra. Digamos que esta segunda forma es una espiral.
A mi modo de ver, yo me siento
más identificado con el primer modelo, ya que somos seres que nos movemos por
deseos (proyectos) a corto plazo, que cuando estamos en el norte en solitario
pensando lo vemos todo muy bonito pero que cuando llegamos al sur nuestros
deseos (proyectos) se ven muchas veces puestos en entredicho por la interacción
de la gente.
Con el segundo modelo no me
siento identificado por una sencilla razón, porque creo que los seres humanos
somos seres subjetivos y el hecho de que empiece el punto de partida en el
centro, es sinónimo de objetividad, de neutralidad y para mí la objetividad es
una aspiración pero a la que el ser humano nunca llegara porque somos seres
subjetivos, es decir, objetividad y subjetividad es algo muy contradictorio
incapaz de dar como resultado la neutralidad.
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